Nuestro concepto de las Escrituras afirma que la Biblia es el estándar supremo de conocimiento. Nos dice qué pensar, pero también cómo pensar, por qué y cuándo. Proporciona las normas para la vida, el pensamiento y la fe. Enseña sabiduría para navegar por las complejidades de la existencia.
La Biblia es revelación de Dios. Es su voz hablándonos. Exige toda nuestra atención. Requiere nuestra completa obediencia. LaBiblia es la revelación de la mente de Dios con respecto a la creación. Dice lo que es real y cómo responder.
Considera esta breve ilustración. En el Antiguo Testamento, la afirmación central del credo se llama el Shemá de Deuteronomio 6: 4-5. Dice: «Escucha, oh Israel: El Señor nuestro Dios, el Señor es uno. Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas».
El Shemá es un ejemplo de la dinámica indicativo-imperativa en la Biblia. Hay tres partes de esta fórmula: una declaración indicativa, que es una declaración de verdad o hecho; un «por lo tanto» literal o lógicamente implícito, que apunta a la respuesta adecuada; y luego la respuesta, que es una aplicación o mandato.
En este caso, el indicativo se encuentra en el versículo 4: «Jehová nuestro Dios, el Señor es uno». El imperativo es el versículo 5: «Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma y con todas tus fuerzas».
El Shemá nos dice en qué consiste la realidad: un creador absoluto, trascendente, soberano, el Señor nuestro Dios, y que sólo Él es Dios. No hay otro. Y hay una relación entre el creador y la criatura: un pacto Señor-siervo. Esto significa que debemos dedicar todo nuestro ser a su honor y servicio, que él nos comunica a través de la Biblia.
En este pasaje, por lo tanto, se nos dice que la respuesta apropiada a Dios es la devoción total en pensamiento, deseo y comportamiento. Esta es una implicación importante de sola scriptura. Dios se comunica con nosotros con autoridad, y debemos escuchar y obedecer debido a quién es él (creador) y qué somos (siervos).
Muy bueno Richard.
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Que buena reflexión. Muy verdadera!!
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